martes, 12 de febrero de 2013

LA CHIMENEA QUE SOÑÓ SER GUITARRA

Hola a tod@s de nuevo!! Para ir poniéndonos en escena me gustaría que cerrarais los ojos y viajaseis en el tiempo hasta los maravillosos 16 años, bien, una vez ahí plantaros delante de vuestro padre y decidle:

- Papá!! quiero fabricar una guitarra eléctrica, tu me ayudarías?
- (censurado, censurado, censurado, censurado) Estudiar!! eso es lo que tú tienes que hacer y dejarte de guitarritas!

Bueno, como vemos que el experimento no ha salido como esperaba, contaremos la historia de la "Red Special", la guitarra eléctrica de Brian May de Queen (os hablaba de ella en este post).

Corría el año 1963 y Brian May contaba con 16 años, poseía una guitarra acústica pero se dio cuenta que con ella no podía interpretar las canciones que él escuchaba en la radio.
Comenzó la búsqueda de una guitarra eléctrica pero pronto se dio cuenta que la guitarras eléctricas de la época escapaban de su presupuesto, incluso las réplicas de las marcas de guitarras originales tales como las Gibson, Fender,...

Puso fin a la búsqueda pero no se dio por vencido, Quién o qué decía que no podía fabricarse su propia guitarra?, acaso el tamaño de un sueño se limita a la cantidad de dinero que alberga su bolsillo?
Brian demostró que no, enfocó sus ganas e ilusión en construirse él mismo su propia guitarra, contó con la ayuda de su padre (Harold May) que era ingeniero electrónico.

En agosto de 1963 comenzaron el proyecto, primero recolectaron los materiales. Para el mástil utilizaron el marco, de madera de caoba, de una chimenea vieja que un amigo de la familia iba a tirar, ya que estaba bastante deteriorado y apolillado. Para la caja de la guitarra un trozo de roble. Para los marcadores del diapasón, Brian encontró en el costurero de su madre unos botones de madre perla que no dudó en utilizar.
Casi puedo ver a padre e hijo saqueando todo lo que encontraron por casa, y a la madre intentando poner a salvo toda suerte de objetos para que no acabaran en la Red Special, cosas de hombres ;)
Para las cuerdas llegó a la conclusión de que tenía que comprarlas, no quiero ni pensar en los experimentos que haría antes de llegar a esa conclusión... no coment.

Llegó el momento de las tomas de sonido, las cuales tras algunos experimentos compró y las modificó para que se ajustaran a su exclusiva guitarra. Para el brazo del trémolo ya dejaron a McGyver a la altura del betún, el cuerpo del brazo era una varilla del acero de una cesta de una bicicleta, la punta de plástico del extremo la hicieron con la bola del final de una aguja de hacer ganchillo, y para los recortes del trémolo unas válvulas de motocicleta, ya que un amigo de Brian disponía de bastante cantidad de ellas.

Tras año y medio, y una inversión de ocho libras, que vienen a ser unos 9 o 10€, la Red Special vio la luz. En un primer momento estéticamente dejó bastante que desear, pero tras una buena pulida y una sesión de barnizado quedó perfecta, tal es así que algún compañero de colegio le ofreció cambiar su guitarra "de marca" por la Red Special, a lo que Brian contestó que no.
Esta obra de ingeniería domestica alcanzó su característica sonoridad tras varios experimentos. Brian al final se dio cuenta que con una moneda de seis peniques sonaba ya como los ángeles, no los de Charlie.
La Red acompañó a Brian en todas las giras y grabaciones de Queen (a excepción de tres videoclips y las temporadas que pasó la guitarra en el luthier) ayudando a Brian a ser considerado como uno de los mejores guitarristas de la historia.

Muy a tener en cuenta es que a día de hoy hay mucha información para poder fabricarte tu propia "Red Special" entre clubs de fans, en la red, aficionados, músicos... y todo esto es gracias a que el bueno de Brian ha compartido siempre toda la información acerca de su guitarra, ya sean geometrías, materiales, montaje, etc. Lo gracioso, por llamarle algo, es que a este carro, como no, se ha subido gente para lucrarse aprovechando la información de Brian para fabricar guitarras en serie. A este hecho Brian siempre se ha opuesto y ha mostrado su disgusto, porque su intención siempre fue ayudar a los aficionados y que disfruten de la experiencia que él vivió al crearse su propio instrumento y lo mejor de todo es que siempre lo hizo sin ánimo de lucro (está claro que Brian no valdría para político de este país).


Hasta aquí el post de hoy, como siempre un placer ver junto a vosotros "lo que no se ve" de las estrellas del olimpo del pop-rock, el post de hoy tiene una lectura positiva: Si tenemos fe en nosotros mismos tenemos el destino en nuestras manos.
Hablando de fe, esto me recuerda a una frase que le dijo mi viejo amigo el Dr. Gregory House a una monja:

- Seguro que tienes mucha fe en Dios, pero a que miras a los lados al cruzar la calle?

Portaros bien!!!
JOSE


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